lunes, 13 de julio de 2009

Se me pasa el semestre y...

...no consigo escribir otra entrada en este blog que ha enflaquecido mucho en los últimos meses. En primer lugar, por tanto, el recuerdo de una persona que inflaba las velas de Goetheando hasta hace ahora casi un año y el saludo desde aquí hacia allá donde esté. También las palabras del escritor Manuel Vicent para Mila, que se me ocurre podrían ser inspiradoras.
"Por eso en cualquier latitud donde uno se halle, el gregal llegará de Grecia; el siroco, de Siria; el lebeche, de Libia, siempre que el viento sea una forma de poderosa locura que, unida a la marea del tiempo, al final te lleve a Ítaca." (Los vientos en el Mediterráneo. Columna en El País, 06.04.08)
En segundo lugar, me gustaría anunciar aquí la V Convocatoria del Concurso Literario Romika García de Cáster. Como en las cuatro restantes está abierto en tres categorías (poesía, ensayo y relato), pero este año se han concebido dos niveles de lengua para dar cabida a más participantes. Estudiantes con un nivel B1 de español pueden presentar sus textos, así como aquéllos que sobrepasen éste. Los carteles están repartidos por la universidad y creo que la publicidad del concurso ha llegado a los alumnos. Veamos ahora cuál es la reacción. Sólo nos queda esperar...
Habría, por lo demás, un tercer, cuarto y quinto lugares que me servirían para dar cabida a los temas que se me han ido ocurriendo en las últimas semanas con el fin de darle volumen al blog. Pienso en la grotesca crisis hondureña; en la verde figura de esos soldados asaltando edificios oficiales, en las contradicciones de las democracias latinoamericanas asentadas a cualquier precio en la figura de un líder único y vitalicio, en las intervenciones o no intervenciones exteriores...
Cavilo sobre los resultados de las elecciones mexicanas, sobre la oscilación del poder entre dos grandes partidos y la ausencia en el sistema político republicano de esa multiplicidad social, cultural y sobre todo económica que caracteriza y conforma al país. Observo la gestión Kirchner en Argentina, desde lejos y sin mucha idea pero convencida de que las dinastías en los centros de poder nunca son provechosas para los ciudadanos. Lamento, una vez más, el atentado de ETA contra un comisario en el País Vasco y me pregunto si la violencia terrorista no contribuye además a callar una violencia social cotidiana, desordenada y brutal, condicionada por la terrible situación económica de muchos ciudadanos de España, legales e ilegales.
Por último, recuerdo con gran gusto y agradecimiento la asistencia a la charla entre Daniel Kehlmann y Mario Vargas Llosa. No tanto el primero como el último se grabó en mi memoria, y me cautivaron su hermosa dicción del castellano y la claridad del timbre de su voz. La enorme cola que precedía al evento fue sorteada por una audaz y paciente compañera, quien además hizo acopio de numeroso botín y a la que en su momento no pude agradecer mi parte del mismo. Gracias, entonces.