Después de la tormenta llega la calma- aquí diré que esta frase es un extracto de una canción de Alejandro Sanz, no sea me acusen de plagio como a Bunbury. Bueno, pues lo que decía, la calma entre un mar de hienas.
Bolivia está intranquila y está claro que Evo no lo tiene fácil. Al margen de mi simpatía, antipatía, empatía o vaya a saber tu tía por Evo, veo, desde lo que me cuentan los periódicos, que los procuradores van contra la "democracia". Y lo pongo entre comillas porque yo no sé si los procuradores tienen razón o si Evo es un dictador encubierto. Mi conocimiento de Bolivia no llega para más pero si hace unos meses hubo una consulta en la que Evo ganó, esos mandatarios deberían aceptarlo. Los muertos, muertos están. Y las luchas justas se ganan en las urnas. Eso sí, hay que educar a la gente a saber votar o a no hacerlo. Ya se sabe que de la ignorancia popular se nutren los políticos para su gloria personal.
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