miércoles, 20 de junio de 2007

LAS FARC

Supongo que hablar de las Farc es tan complicado como hablar de ETA. Así es que no hablaré de ninguna de las dos, es decir, no voy a intentar explicar qué son las FARC porque no sé exactamente qué es lo que mueve a la violencia a dar sentido a la vida. Lo mismo con ETA. Sin embargo, me gustaría apuntar el cambio que por su causa se está produciendo en Colombia. Parece que hay un nuevo talante de negociación entre las FARC y el gobierno colombiano. Sería bueno que esta situación no desembocara en un fracaso similar a los Acuerdos de La Uribe. Al menos sería deseable para Colombia puesto que ello significaría que el pueblo colombiano puede vivir una democracia verdadera donde cabe el diálogo, la negociación y el perdón.
La excarcelación de 193 guerrilleros se ve en términos de indulto y no de amnistía, o sea, que se les va a perdonar la pena sólamente. Supongo que ese sólamente conlleva la inexistencia de programas de reinserción social y similares, que quizás fueran, bajo mi punto de vista, más necesarios de lo imaginado. Lo que se les ha pedido en contraprestación al indulto es la firme voluntad a no delinquir ni asociarse a grupos guerrilleros. Estas condiciones parece que no las han cumplido 5 candidatos al indulto, puesto que han sido trasladados de nuevo a las instituciones penitenciarias en las que se encontraban.
Quizá este primer paso del gobierno lleve a liberar a las más de 50 personas retenidas durante años por las FARC.
Esperemos que toda esta iniciativa no quede en agua de borrajas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Teniendo en cuenta que las FARC controlan una grandisima parte del pais esto supone un gran avance en el proceso. Pero yo creo que tras tantos años de enfrentamientos la solucion tardara mucho en llegar. Quizas algun dia las FARC se cansen de estar siempre en el punto de mira del ejercito y sus militantes tiren las armas para poder volver a casa en paz. Pero por ahora, con todos los intereses politicos, economicos y territoriales que existen en el trastero dificil veo que nuestra generacion pueda vislumbrar un final feliz para algunos, que no para todos.

Anónimo dijo...

“En mi humilde opinión” es una frase de la que mi muy buena mejor amiga y yo nos burlamos constantemente, pues nada mejor que utilizar esta capacidad que se nos ha dado a todos y que lamentablemente o muchos la dejan llenar de polvo en el mejor de los casos, o ella representa un riesgo para muchos otros en el peor de los casos, y valga citar esta segunda opción teniendo en cuenta el contexto de este comentario. Entonces opinar es un acto valioso y por eso rechazo ese adjetivo que se le suele anteponer a las ideas propias.
Esta introducción va de dientes para afuera, pues hoy, cuando pensé en lo que puedo decir respecto a esta noticia sobre el lío uribe-paras-farc y Co, lo primero que se me vino a la cabeza fue justificar mi momentánea lejanía del conflicto -debido a la abundancia de lecturas académicas- comenzando mi comentario con la mismísima frase: “En mi humilde opinión”. Ahora sí, a lo que vinimos:
Aunque a mí también me sorprendió enterarme de la excarcelación de los miembros de las FARC, por mi mente no pasó la idea de que esto significara un avance en el proceso. Esto no lo traduzco como pesimismo sino como falta, o mejor, ausencia de credibilidad en el gobierno, que bastante ha demostrado su creatividad para mentirle al país y el sinismo que posee para mantenerse en el poder acompañado de los otros que lastiman los Derechos Humanos. Para mí este gesto de Uribe es una especie de cortina de humo, por un lado, para hacer ver que “la ley es para todos” y no sólo para los reinsertados paramilitares, y por el otro, para quedar bien con el gobierno de Francia, debido a los vínculos de Ingrid Betancourt con ese país europeo. Así que lo de la democracia va a tardar.
La labor ahora, es devorar cuanta información caiga en mis manos –gracias web- y subir el estatus de mi opinión a una que también pueda plantear soluciones, para que el “quizás” se convierta en un hecho.

Anónimo dijo...

Lamentablemente el tema de las FARC ha vuelto a ser noticia fuera de Colombia: El 18 de junio 11 de los diputados del Valle del Cauca, que fueron secuestrados el 11 de abril del 2002, fueron asesinados. El gobierno intentó un rescate militar y el resultado fue una masacre. Este hecho reafirma mi posición frente al tema del secuestro en Colombia: sí al acuerdo humanitario.

Mila dijo...

Qué triste es ver cómo tras 40 años se ha enquilosado el encono y no hay forma de hacer las cosas de otra manera. A mí me sorprende que el gobierno, que aparentemente quiere negociar, pierda la serenidad y envía a las fuerzas armadas a liberar rehenes.
Cada día entiendo menos el problema. Parecía que condonaban penas y que estaban dispuestos a esperar una respuesta positiva de las FARC. En fin, a ver si no perdemos la esperanza de una salida pacífica al conflicto.